Ayuntamiento de Santander


Ayuntamiento reconocido por buenas prácticas municipales en la prevención frente al Acoso Escolar

21 Jun 2020
Foto archivo: entrega placas Programa TEI
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La FEMP, a través de esta iniciativa que desarrolla en colaboración con el Ministerio de Educación y Formación Profesional, ha premiado el proyecto TEI (Tutorías Entre Iguales) que ya fue reconocido por el Ilustre Colegio Oficial de Psicología de Cantabria

El Ayuntamiento de Santander ha sido reconocido por la Federación de Española de Municipios y Provincias (FEMP) en el V Concurso de Buenas Prácticas Municipales en la Prevención e Intervención frente al Acoso Escolar.

Así lo ha anunciado la concejala de Educación, Noemí Méndez, quien ha explicado que esta distinción supone el “reconocimiento y visibilidad” al esfuerzo y trabajo desarrollado en la ciudad en este ámbito.

En el concurso, que se desarrolla en colaboración con el Ministerio de Educación y Formación Profesional, se ha galardonado el proyecto TEI (Tutorías Entre Iguales) - diseñado para prevenir el acoso y promover la convivencia en las aulas y reconocido también por el Ilustre Colegio Oficial de Psicología de Cantabria, que coordina el desarrollo del programa en la comunidad autónoma.

En este certamen, en el que también se valoran los trabajos desarrollados por los gobiernos locales de hasta 20.000 habitantes y de aquellos con una población superior en cuestión de prevención del absentismo escolar, se han distinguido además proyectos de los Ayuntamientos de Avilés, Conil de la Frontera, Molina de Segura y Rivas-Vaciamadrid frente al acoso.

La responsable municipal, que ha agradecido el reconocimiento al programa TEI, ha asegurado que es un “orgullo” para el Ayuntamiento recibir este premio ya que la ciudad “está muy comprometida con las labores de prevención e intervención frente al acoso escolar”.

Según ha detallado, el proyecto ‘Tutorías Entre Iguales’ se desarrolla en diferentes colegios de la ciudad para generar alianzas entre los propios escolares que favorezcan su autoestima y disminuyan su inseguridad, contribuyendo así a generar un clima de convivencia en las aulas que haga posible evitar los conflictos e integre en los centros la filosofía de tolerancia cero al acoso.

Méndez ha afirmado que el Consistorio seguirá potenciando este programa porque se considera “clave” para la ciudad y sirve como “ejemplo” de buenas prácticas en la lucha contra esta problemática.

Sobre el Programa TEI

Está basado en la tutorización emocional entre iguales, el respeto, la empatía y el compromiso; se desarrolla a través de la concejalía de Servicios Sociales en colaboración con La Caixa; se está llevando a cabo desde el curso escolar 2018-2019 y, actualmente, cuenta con la participación de 10 centros educativos en la ciudad, y su objetivo a medio-largo plazo es convertir a Santander en una ciudad TEI.

Este programa se suma a otros proyectos que el Consistorio realiza a través del área de Juventud con asociaciones y colectivos como la asociación cántabra antibullying, que ofrecen asistencia gratuita a jóvenes víctimas de acoso escolar.

Hay tres equipos de trabajo, investigación y evaluación que tienen como objetivo el desarrollo y la innovación del programa, ubicados en el ICE de la Universidad de Barcelona, en la Universidad de Santiago de Compostela y en la Universidad de Alicante, donde se encuentra el Equipo de evaluación y desarrollo.

El programa TEI inició su desarrollo teórico y estructural en el año 1999 a partir de la idea original de Andrés González Bellido; y su aplicación en centros educativos en el curso 2002-2003.

Actualmente es el programa de mayor implementación a nivel español (por centros que lo aplican, por profesorado formado y por alumnos implicados) y uno de los primeros a nivel mundial.Más del 98% de los centros que han iniciado su desarrollo lo siguen aplicando.

Busca sensibilizar a toda la comunidad educativa sobre los efectos de la violencia, concienciar sobre las causas de la violencia e informar sobre las consecuencias personales, sociales y educativas.

Igualmente, pone el foco en los procesos de integración de los alumnos en favor de una educación inclusiva y empoderar al alumnado, como sujeto dinámico de la convivencia, en la prevención de la violencia.