Ayuntamiento de Santander


Moción para excluir subvenciones a las actividades ideológicas o políticas

16 Sep 2019

Vox Santander
 
M O C I Ó N que presenta Guillermo Pérez-Cosío Mariscal, concejal del grupo Mixto y de Vox, al amparo del artículo 45 del Reglamento Orgánico del Pleno de 30 de septiembre de 2004, para que pueda ser debatida y aprobada en el primer Pleno que se celebre.

 

EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

 

       “Paz, Piedad y Perdón”. Estas fueron las palabras pronunciadas el 18 de julio de 1938 en el Ayuntamiento de Barcelona por el entonces presidente de la Segunda República Manuel Azaña Díaz, al cumplirse los dos años del inicio de la dramática y fratricida contienda (in)civil española.

       El mensaje, además de una muestra de pesimismo sombrío y claro presagio de derrota, ha sido considerado también como la primera llamada a la reconciliación entre españoles de ambos bandos y se ha repetido, entre otras muchas ocasiones, en la tramitación parlamentaria de la Ley de Amnistía de 1977 y más recientemente en la de la conocida como Ley de Memoria Histórica.

       Ochenta y un años después, una asociación cultural santanderina anunció que quería tejer una red de complicidad poelítica contra el fascismo y llevó a cabo en días pasados una “performance” colectiva invitando a 300 personas a recrear de forma voluntaria una terrible foto del campo de concentración de la Magdalena en la que se ve a los internos (excombatientes republicanos) asistiendo a un oficio religioso. En otras imágenes del mismo lugar que no fueron escogidas por los organizadores se les ve llevando a cabo ejercicios gimnásticos o asistiendo a una clase de geografía impartida en el interior de un aula.

       Desde luego poco tienen que ver esas fotografías con las de los campos de internamiento organizados en ese mismo periodo por las autoridades francesas al sur de su frontera, donde los excombatientes republicanos fueron separados de sus familias y recluidos en barracones o zonas vigiladas a la intemperie, sin agua potable ni ropa de abrigo y sin unas mínimas condiciones higiénicas.

       Pero lo que se quiere destacar con esta moción es que esta asociación cultural, con el único voto en contra del concejal de VOX, obtuvo del Ayuntamiento una subvención de 1.347,50 euros para organizar el pasado mes de julio una exposición fotográfica en la que se mostraba a unos individuos portando armas de guerra y que al parecer pertenecen a unas denominadas brigadas de autodefensa indígena, protagonistas de varios levantamientos armados contra el Gobierno en la región de Michoacán, Méjico. El sorprendente título de la muestra era “¿Por qué vivimos en el paraíso?”.

       Esta asociación integra también una editorial que se define como cultura crítica y edita obras como “FBI (Fascismo de Baja Intensidad)”, “Una traducción rebelde. Políticas de la cultura comunitaria”, “Relatos de la Memoria Herida”, “Feminismos a la Contra” o “España” un libro éste que al parecer contiene un poema de igual nombre del que se dice que ya le debió resultar difícil a su autor titularlo así sin buscar eufemismos o máscaras.

       En definitiva, cultura puede ser que sí, pero desde luego es cultura oficial, es decir ni cultura crítica ni contracultura, entendida ésta como movimiento social que rechaza los valores, modos de vida y cultura dominantes, que es como se define el término en el Diccionario oficial. Contracultura hoy sería reeditar las “Obras completas” de José Antonio, el “Joven, así debes ser” de Mons. Tihamér Tóth, o incluso, dentro de la propia izquierda más combativa, “Por qué perdimos la guerra” de Diego Abad de Santillán.

       Precisamente en el libro de este autor, peón de albañil, herrero, editor, estudiante de Filosofía y Letras y Medicina en las universidades de Berlín y Buenos Aires, dirigente faista y combatiente de primera línea, que regresó a España en 1976 tras la muerte de Franco y rechazó la pensión que le ofrecieron como exconsejero de Economía de la Generalidad de Cataluña para fallecer en 1983 en la residencia de ancianos de los Hogares Mundet de Barcelona, regentada a la sazón por las Hijas de María, encontramos unos párrafos que desde aquí ofrecemos a esa asociación cultural para hacer mas intensa su próxima “performance” contra el fascismo:

       “Un buen día se recibe en las brigadas pertenecientes al XXIII Cuerpo de Ejército una orden de éste para que cada brigada mandase un pelotón o escuadra de gente probada como antifascista. Así se hace y se les dan instrucciones completas para que marchen a Turón, pueblecito de la Alpujarra granadina de unos 2.500 habitantes. Se les dice que hay que eliminar a fascistas para el bien de la causa. Llegan a Turón los designados y matan a 80 personas, entre las cuales la mayoría no tenían absolutamente porqué sufrir esa pena, pues no era desafecta y mucho menos peligrosa, dándose el caso de que los elementos de la CNT, del Partido socialista y de otros sectores mataron a compañeros de sus propias organizaciones, ignorando que eran tales y creyendo que obraban en justicia, como les habían indicado sus superiores. También hay casos de violación de las hijas para evitar que sus padres fuesen asesinados. Y lo más repugnante fue la forma de llevar a cabo dichos actos, en pleno día y ante todo el mundo, pasando una ola de terror trágico por toda aquella comarca. Se estaba construyendo la carretera de Turón a Murtas y los muertos fueron enterrados en la caja misma de la carretera. Se pretendió silenciar la cosa, pero ante la presión de la opinión pública, el Tribunal permanente del Ejército de Andalucía no pudo permanecer impasible y se ordenó la instrucción de las primeras diligencias. Se desenterraron 35 cadáveres renunciando a desenterrar el resto, pues ello suponía la destrucción total de la carretera en que estaban enterrados...”

       (Diego Abad de Santillán: ¿Por qué perdimos la guerra? Buenos Aires 1940, pág. 141)

       Hechos como estos nos convencen de la necesidad de poner fin a las subvenciones públicas a organizaciones o asociaciones que practican el proselitismo y la propaganda política o ideológica de cualquier signo.

       Por todo lo anterior, se propone al Pleno la adopción del siguiente A C U E R D O:

       Mostrar la voluntad del Pleno de modificar la Ordenanza reguladora de la concesión de subvenciones en régimen de concurrencia competitiva para el fomento de la cultura en el Municipio de Santander, aprobada en sesión ordinaria de fecha 29 de noviembre de 2007, a fin de excluir de dichas subvenciones a las manifestaciones o actividades culturales de contenido político o ideológico de cualquier signo.

Santander, 16 de septiembre de 2019