Ayuntamiento de Santander


El conservatorio rinde homenaje al profesor Guillermo Herrero dedicándole una de sus aulas

24 May 2016
imagen Ayto. Santander
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El alcalde y la concejala Ana González Pescador han asistido al acto, que ha incluido también un recital de alumnos de saxofón

El Conservatorio Municipal Ataúlfo Argenta ha rendido homenaje este lunes al profesor de saxofón Guillermo Herrero, fallecido el pasado diciembre, con la colocación de una placa en un aula que a partir de ahora llevará su nombre.

La comunidad educativa del centro pretende recordar y reconocer así la labor docente desarrollada por Herrero y la dedicación con la que trabajó en la formación de jóvenes músicos.

El alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, y la concejala de Economía y Hacienda, Ana González Pescador, han acompañado a la viuda y los hijos del profesor en este homenaje, un gesto de gratitud de toda la comunidad educativa por su contribución a la actividad del centro y a la transmisión del amor por la música a las nuevas generaciones.

Tras el descubrimiento de la placa, alumnos de saxofón del conservatorio santanderino han ofrecido un recital en recuerdo de Herrero en el auditorio del centro, y cerró el acto la Big Band Santander.

El profesor Guillermo Herrero nació en una familia de músicos y a los once años empezó ya a acompañar a sus familiares en algunas actuaciones, primero, con la percusión, y más adelante en los instrumentos de viento.

A los 15 años entró como ‘educando’ en la Banda Municipal de Santander, donde preparaba y recogía partituras y ayudaba al director con los preparativos, a la vez que estudiaba y se preparaba para ser músico.

Comenzó tocando el clarinete, pero al quedar una plaza libre de saxofón, inició su andadura con el instrumento que finalmente le daría el título de profesor de música. Con 22 años consiguió su primer contrato profesional y con 24 aprobó la  oposición para la Banda Municipal de Santander.

Herrero compaginó su trabajo en la banda con la orquesta Tobacco Road, en la que permaneció 30 años, y formó parte de numerosas agrupaciones musicales a lo largo de los años, entre ellas, la Big Band Santander o Vespa Groove.

A principios de los 90 comenzó a ejercer de profesor en el Conservatorio Ataúlfo Argenta, en el que a lo largo de los años ha ayudado a varios de sus alumnos a alcanzar su sueño de ser músicos.